Hoy les hablaré de una mujer inmigrante que fue en busca de una vida mejor, para no sólo apoyarse a ella misma, pero también para ayudar a su familia. Esta mujer se llama Daisy Marisol Palma Santos y es mi madre. Ella emigró hacia los Estados Unidos en el año 1999, cruzó la frontera por Arizona y luego viajó hacia Milpitas, California. Tenía varios miembros de la familia en esta ciudad. Fue en busca de un trabajo, el cual encontró en el Taco Bell de Milpitas. Aunque no era un empleo que pagaba mucho, cuando lo comparaba con lo que ganaría en México, era mucho mayor. En la entrevisra ella habla de las dificultades de ser una inmigrante en los Estados Unidos, donde sólo no hablar ingles te hace la vida muy difícil. Te sientes fuera de lugar, a veces perdida en tu propio mundo. Te sientes con ese miedo de no poder preguntar a nadie nada.
Después de vivir en California por un año, Marisol se mudó para Chicago donde nació su primer hijo, Ryan. Después de un tiempo allí, quiso mudarse a un lugar nuevo. Es entonces cuando se fue a Salt Lake City, Utah. En Utah, ella se dedicaba en limpiar casas al principio. Dos años después nació su segundo hijo, Richard. Marisol vivió la mayoría de su tiempo en los Estados Unidos en Utah, trabajando en Sam’s Club, empezó trabajando en la comida en Sam’s Club y después de unos años fue promocionada a manejadora del departamento de comida. Ella siempre ha sido una persona que trata de mejorar su vida y mas importante la vida de sus hijos. Siempre me ha dicho la importancia de darle a sus hijos una mejor vida que ella tuvo de niña y de darles lo que ella quería de niña. Cuando yo cumplí 8 años fue cuando nació mi otro hermano Robert, y dos años después nació mi otro hermano menor Ricky. Mi mama siempre ha sido humilde y ha enseñado a mis hermanos que nunca nos olvidemos de donde viene nuestra familia y aprecie todas las oportunidades que tenemos.
Mi familia viaja a México para visitar a nuestros parientes, cada vez que hemos ido, mi mamá siempre trata de dar un regalo a cada miembro de su familia. Nuestra mamá tiene nueve hermanos y hermanas, lo cual hace que también tenga muchos sobrinos. Pero ella siempre esta dispuesta a darle algo a cada persona y nunca se olvida de nadie. También hemos regresado a su pueblo varias veces donde le da mas regalos a la gente con la que ella creció en el pueblo. Mi mamá siempre le ha dado dinero a la gente que lo necesita, yo la he visto darle más dinero a gente cuando va de compras en México o cuando sale a restaurantes. ¿Un día le hice le pregunta de porqué le daba de más a estas personas que no conocía? Ella me dio la simple respuesta de que Dios le ha dado muchas bendiciones en la vida y darle más dinero a estas personas que no ganan mucho es lo mínimo que puede hacer por todas las bendiciones que tuvo.
Cuando tuve 12 años fue cuando mi familia se mudo para Wisconsin, mi mamá vino en busca de una vida mejor. Cuando llego aquí empezó a trabajar en el Walmart de Winona. Teníamos una cabaña donde vivíamos cuando llegamos, pero mi mama siempre quería comprar una casa que fuera de ella. Empezó a guardar dinero y se le presentó una oportunidad para comprar una casa hace seis años. Una casa que fue de sus sueños, con un jardín grande y mucho espacio para todos sus hijos. Esta es la casa donde todavía vivimos en Fountain City. WI. Esto todavía no fue suficiente para mi mama. Una casa que fuera suya fue unas de sus grandes metas cuando se mudó a Wisconsin, pero ella todavía tenía esperanza de coemnzar su propio negocio. Esto fue cuando empezó a investigar de cómo podía abrir un centro de cuidado de niños. Después de dos años de tomar clases de cómo cuidar niños pudo conseguir su licencia. Empezó su negocio hace un año y le ha ido muy bien y se le han presentado muchas más oportunidades.
Quiero que vean que esta fue la misma niña que vivía en el pueblo de San Joaquín en Oaxaca. Una niña que nunca tuvo ropa nueva de marca o ni siquiera un par de tenis. Una niña que a veces le faltaba de comer porque su familia no tenía dinero para la comida. Una niña con esperanzas de una muñeca cada año durante la navidad, una muñeca que no recibió. Esta es una niña con metas grandes de seguir por delante y mejorar su vida. Esta niña creció en una mujer y mamá maravillosa que ha logrado tantas metas en su vida que tal vez ni ella lo pudo creer cuando era chica. No sólo ha mejorado a su vida, pero también les ha dado muchas oportunidades a sus hijos para que ellos siguan estudiando en la Universidad. Quiero agradecerle a mi mamá por siempre haberme dado ese amor como mamá y por siempre creer en nosotros y por darnos un techo sobre nuestras cabezas por todas nuestras vidas. Eres una grande mama y nunca te podre agradecer todo lo que has hecho por nosotros.